Por Noemi Canche

No todas las mujeres tienen las mismas oportunidades, para la mujer urbana es más fácil, ya que papá y mamá la apoyan porque tienen una mente más moderna y no arraigada por una cultura machista.

 Ahora hablemos del tema mujer rural, en donde las mujeres son educadas para ser las mejores amas de casa, pero no para ser una mujer libre, soñadora, independiente, no para ser una cabeza de familia, les dicen: tu aprende a cocinar, a lavar y atender los hijos, aprende los quehaceres de la casa para que seas buena esposa y tu esposo no te vaya a pegar porque no lo sepas hacer.

En donde papa en lugar que te apoye a obtener tus logros académicos, te dice tu no porque vas atender a tu marido. Les venden tanto la idea que en automático cumplen dichos ideales, para después casarse y tener muchos hijos, ellas pierden las esperanzas, las oportunidades.

Crecen en un mundo idealizado, que encontrarán a un príncipe azul, se casarán y vivirán felices para toda la vida.

Juntarse y embarazarse desde los 15 años (edad promedio) es lo más natural, apenas dejan el mando y poder de papas y sin poder respirar una vida independiente sin restricciones se convierten en amas de casa bajo órdenes de un marido más exigente que papás, hasta allí llegó la oportunidad de ser independientes de luchar por sus sueños y anhelos, ahora su mundo solo será su familia (esposo, e hijos)

Pocas son las que corren con la suerte de encontrar un marido bueno, que les aporte lo necesario hablando en todos los términos, muchas son maltratadas, golpeadas humilladas, porque el hombre, se sienten con el derecho por su machismo y porque ellos son los que aportan lo económico, y creen que la mujer no vale su opinión porque el las mantiene, sus voces son silenciados por alguien más que se cree superior a ellas.

Y así seguirán sin saber que afuera hay un mundo de oportunidades de ser feliz, de que realizarse como mujer no solo es casarse, que se puede ser feliz sola y haciendo lo que mas les guste.  

Para ellas es un ciclo de vida; nacer, crecer, casarse, reproducirse y morir. Hay que buscar cambiar este dogma, pero ese será tema en la sig. Edición de la revista.